Por María Emilia Marin
¿Dónde se encuentra el niño de Isinche?
En una de las provincias de la zona centro del país exactamente en Cotopaxi, en el cantón Pujilí, en la Hacienda Isinche Grande a 3 kilómetros de dicho cantón, se encuentra ubicado uno de los niños más milagrosos el cual mueve la fe de muchos feligreses; en honor a todos lo milagros concedidos le regalan ropa placas que son vistas en su templo.
Don Bolívar León, quien es el dueño de la hacienda Isinche Grande, recibe con las puertas abiertas a los creyentes que visitan al niño de Isinche, la leyenda nace donde antiguamente funcionaba un obraje:
“Se dice que inicios del siglo XVIII, un mular que transportaba un gran fardo de lana se acostó y no quiso continuar con su camino. El arriero quitó el bulto del animal y lo destapa, se llevó una gran sorpresa cuando encontró una figura tallada en madera del Niño; la misma noche, el propietario de la hacienda tuvo un sueño donde la imagen de Jesús se le aparece y le manifiesta que quería permanecer en el lugar, y que le construyera un templo. Después del terremoto de Pujilí en 1996, la propiedad queda casi en ruinas entonces; Don Bolívar se dio la tarea de realizar la restauración de la hacienda y del templo.” (Go Raymi , s.f.)
¿Cuánto dura la celebración?
Esta celebración dura 3 días, en el primer día (6 de enero) se lleva a cabo el Pase del Niño de Isinche; en el segundo día se celebra la misa en donde las loas empiezan a ser proclamadas por los reyes y negros de color y se arman arcos de flores por donde pasa la imagen.
Finalmente llega el tercer día que se le conoce como el Día de Tareas, en esta actividad intervienen todos los protagonistas del Pase del Niño, el Mayordomo quien es el encargado de repartir las tareas a los caporales; cuando esta tarea se da por concluida se pasa a repartir frutas, caramelos y pan.
¿Cómo es la celebración?
Viene acompañada de una gran algarabía empieza con los toros de pueblo donde convoca a propios y extraños, castillos, volatería, bandas de pueblo, cantos y manifestaciones propias de esta fiesta, las comparsas tienen un gran rol donde participan las conocidas chinas, caporales y yumbos, negros blancos, monos y los Reyes Magos son uno de los personajes que están presente durante la celebración.
La fiesta se encuentra patrocinada por priostes y algunos donantes de la comunidad, la celebración tiene como inicio en frente de la iglesia, donde se recibe al Niño mediante loas por los negros loeros, ángel de la estrella y reyes.
Se tiene una peculiar creencia que con el paso del tiempo el niño crece y crece, una muestra de ello es toda la ropa que tiene y que no le va quedando, cuenta que el niño es muy juguetón y travieso pues le encanta jugar en medio del campo.
Foto: Exposición Virtual de Arte Pujilenses